
El liderazgo también se ha visto afectado y tras la pandemia los líderes han tenido que adaptarse y hacer cambios importantes.
Las jerarquías se dejaron de lado y ahora se ha generado un espacio en donde cada miembro del equipo se siente cómodo y con un propósito en su rol.
Los líderes se han vuelto más flexibles y han aprendido sobre cómo adaptarse a los miembros del equipo y no al revés.
Balance entre vida privada y profesional. Ahora se tiene un profundo entendimiento sobre la importancia de equilibrar cada área de la vida.
Sobre la diversidad y equidad se ha aprendido que no se habla solo de género, sino también de pensamiento y conocimiento.
Compartir esta entrada: